EL ARTÍCULO DEL MES

El lago Vostok

Con sus 14.000.000 millones de kilómetros cuadrados, la Antártida es el cuarto continente en tamaño, supone el 9 por ciento de las tierras emergidas, su forma es circular, con una península ( que supone el dos por ciento del total continental ), situada al noroeste, esta península es estrecha y alargada con forma de s, su parte septentrional dista 1.000 kilómetros de la zona más austral del continente sur americano.

Debido a su situación geográfica, se sitúa en torno al polo sur, está muy condicionado por su climatología, al recibir una escasa radiación solar; si a esto le añadimos su notable altitud, en torno a los 2.000 metros sobre el nivel del mar, y su aislamiento de la circulación oceánica global, al estar circunvalada por una corriente fría, que la impide recibir la influencia de corrientes más cálidas; nos encontramos con el continente en el que se producen las temperaturas más bajas de todo el planeta.

Si exceptuamos un tres por ciento de su superficie, que permanece libre de hielos durante el verano; el continente antártico está permanentemente cubierto por una gran capa de hielo (indlandsis), que alcanza una altitud media de 25.000 metros, llegando a los casi cinco kilómetros en la tierra Adelia.

Esta inmensa coraza helada se desborda en algunos puntos saliéndose del continente en forma de grandes barreras que ocupan algunas de las bahías antárticas, su volumen es de veinte millones de kilómetros cúbicos. Esto supone que en la Antártida se concentra el 90 por ciento del hielo planetario, y el 80 por ciento del agua dulce.

Todo esto resulta sorprendente, si tenemos en cuenta que nos encontramos en el continente más seco del planeta, las precipitaciones medias anuales son de 160 milímetros, y un 90 por ciento de su territorio es un desierto nival, siendo su aire más seco que el de los desiertos cálidos. Otro aspecto significativo son los fuertes vientos que se inician en el centro del continente, desplazándose en diferentes direcciones a velocidades de hasta 200 km por hora; el récord absoluto de velocidad del viento se registró en el continente helado alcanzándose una velocidad de 321 kilómetros por hora.

Con estas condiciones no es extraño que la biosfera esté escasamente representada en estos ambientes. No existen establecimientos humanos permanentes, reduciéndose su permanencia a las 65 bases, en su mayor parte científicas que se reparten entre 30 naciones.

Una de estas es la base rusa Vostok, situada a 78 grados de latitud sur y a 106 de longitud este, esta base fue fundada en los años cincuenta por la entonces unión Soviética, situada a 3.700 metros de altitud en pleno corazón del continente. Vostok significa en ruso, oriente o este y fue el nombre del primer barco ruso que exploró el continente. Aquí se registró la temperatura más baja de las medidas por el ser humano en la tierra, fue en 1983, alcanzándose los menos 89 grados centígrados. A finales de los cincuenta principio de los sesenta, los científicos soviéticos descubrieron un lago subglacial situado 3.700 metros por debajo de la base, dándole el mismo nombre que esta. Se trata del mayor lago subglacial descubierto hasta ahora, tiene una extensión de 15600 kilómetros cuadrados, con unos 250 kilómetros de largo por 50 de ancho, su profundidad media es de 345 metros, alcanzando los 1.000 en su zona más abisal, posee 5.400 kilómetros cúbicos de agua dulce, está dividido en dos por una cordillera y se sabe de la existencia de una isla.

A pesar de que el agua está a menos tres grados centígrados se mantiene líquida (el agua dulce se congela unos dos grados antes que el agua salada), esto se puede explicar por el hecho de que el hielo se licua a grandes presiones (recordemos que inmediatamente encima del lago se asientan 3.700 metros de hielo, otra hipótesis es que la corteza terrestre en esta zona es muy delgada pudiendo recibir el agua el calor geotérmico del manto.

El nivel de oxígeno de esta masa de agua es cincuenta veces mayor que la de cualquier lago superficial. Se piensa que el agua de este lago tiene un millón de años, sin embargo existen otras hipótesis que apuntan a la existencia de ríos subglaciales que conectarían a otros lagos menores, por esta razón podría ser que el agua del Vostok pudiera haber estado conectada a una red lacustre y no llevar aislada tantos años como se pensó en un principio.

El pasado 8 de febrero se anunció que los científicos rusos de la susodicha base, establecieron contacto con las aguas, aguas de las que se extraerán muestras que podrán servir para el mejor conocimiento del lago, se especula con la posibilidad de que en sus profundidades puede existir vida, vida que llevaría aislada miles o cientos de miles de años del resto de la biosfera.